Gracias a los clientes que creen en Jazz Cup, hemos donado 496 copas y seguimos contando. Únete a JAZZ cup en la lucha contra la pobreza menstrual.
¿Sabías que la pobreza menstrual es una de las principales razones por las que las niñas abandonan la escuela?
Los datos que nos quitan el sueño:
En Colombia,
- Cientos de niñas en comunidades pobres terminan abandonando la escuela después de faltar repetidamente a clase y quedar rezagadas debido a la falta de acceso a productos de higiene femenina.
- Las mujeres, debido a la falta de información y acceso a productos menstruales, terminan usando elementos peligrosos como periódicos, trapos viejos e incluso compartiendo toallas sanitarias usadas entre la familia, poniéndose en alto riesgo de infecciones potencialmente mortales.
- El 40% de las mujeres dice haber faltado a sus actividades diarias por su periodo.
En Estados Unidos,
- El 20% (1 de cada 5 adolescentes) ha tenido dificultades para pagar productos menstruales o no ha podido comprarlos en absoluto.
- El 84% (más de 4 de cada 5 adolescentes) ha faltado a clase o conoce a alguien que ha faltado a clase por no tener acceso a productos menstruales.
- El 25% (1 de cada 4 adolescentes) ha faltado a clase por falta de acceso a productos menstruales.
¿Qué es la pobreza menstrual?
La pobreza menstrual se define como el problema global caracterizado por el acceso limitado o nulo a productos menstruales, instalaciones de higiene, gestión de residuos y educación. Tiene importantes repercusiones físicas, mentales y emocionales, especialmente para las mujeres de bajos ingresos. Cuando no pueden permitirse productos menstruales, las niñas pueden verse obligadas a faltar a la escuela o al trabajo, lo que tiene consecuencias a largo plazo para su educación y perspectivas económicas. Además, la pobreza menstrual puede empeorar las vulnerabilidades existentes, empujando a mujeres y niñas hacia estrategias precarias de afrontamiento.
En JAZZ cup hemos identificado que las principales dificultades que enfrentan las mujeres en contextos menos afortunados son la falta de acceso a productos de higiene menstrual y al conocimiento y la información confiable sobre la menstruación. En respuesta, hemos trabajado con las siguientes fundaciones para donar nuestras copas menstruales, y crear talleres y espacios seguros para compartir conocimientos sobre anatomía, educación menstrual y sexual, así como la información necesaria para que las copas donadas tengan un uso seguro y responsable.
Fundaciones aliadas que nos han ayudado a donar 496 copas a mujeres necesitadas:
- Fundación Comparte por una Vida Colombia. (Cúcuta)
- Fundación Costeño Social. (Guachaca, Santa Marta)
- Fundación Obras Sociales Betania. (Manizales)
- Corporación Sagrada Familia. (Manizales)